El empresario farmacéutico es también poeta y novelista. Acaba de publicar “Morir lo necesario”, un thriller que Vargas Llosa presentó en la Feria del Libro.
El curioso caso de Alejandro G. Roemmers bien podría sintetizar lo que sucede, precisamente, con Alejandro Roemmers. Este autor, de 64 años, viene de publicar un thriller de lo más intrigante: Morir lo necesario figura entre los diez libros más vendidos del momento. Y su trama, como la de cualquier policial, incluye un cadáver en el predio de un barrio privado de zona norte en construcción, cuya muerte dispara la trama y hay que investigar.
Le toca al detective Luis G. Fernández (esa misteriosa letra “G” como la del segundo nombre de Roemmers) encontrar la respuesta. La historia transcurre antes, durante y después de la pandemia, y vincula un mundo de drogas y corrupción, amistad y lealtad, y un súbito giro hacia el final.
Son 379 páginas de intriga y suspenso. Todo lo recaudado por la venta de la novela, editada por Grijalbo uno de los sellos del gigante editorial Penguin Random House, será donado a Unicef.
Pero lo curioso es él, Alejandro. Roemmers proviene de una familia acaudalada, fundadora del laboratorio Roemmers, uno de los principales en el país (los medicamentos de cajita amarilla). No es su primera experiencia escribiendo, puesto que empezó a hacer poesía a los ocho años y hasta el momento lleva publicados una docena de libros, mayormente de poesía.
El regreso del Joven Príncipe –un volumen de carácter espiritual, aparecido en 2008– fue traducido a treinta idiomas, presentado en París con todas las pompas –porque es también una continuación de El Principito de Antoine de Saint-Éxpery– y ha vendido, atención, más de tres millones de ejemplares. De nuevo: estamos hablando de un autor argentino que lleva vendidos ¡más de tres millones de ejemplares!
Quién es
Y sin embargo, ¿quién es Roemmers? Además de distinciones y reconocimientos varios (por la Legislatura porteña, por el Congreso y así), además de festejar sus cumpleaños en el exterior invitar, all inclusive, a sus amigos, este escritor preside desde 2013 la Fundación Argentina para la Poesía.
Es también el creador de la obra musical Franciscus, sobre la vida de San Francisco de Asís –de quien el Papa tomó el nombre–, ganadora del Premio ACE en 2016. La SADE lo nombró Embajador de las Letras Argentinas y hasta ha sido postulado para el Premio Nobel de Literatura.
Morir lo necesario tuvo su presentación estelar durante la Feria del Libro de este año, en la Sala José Hernández, la más grande del predio, con un público nutrido que incluyó al pianista Horacio Lavandera en la primera fila y nada más y nada menos que al Nobel peruano Mario Vargas Llosa como uno de los disertantes en su mesa.
Rememorando quizá sus años como periodista en Francia, Vargas Llosa indagó en su faceta de empresario devenido poeta y novelista: “Probablemente, ustedes no conozcan el caso de un empresario que sea poeta y novelista”, señaló el creador de la magistral Conversación en La Catedral. Y también ha señalado: “En esta novela, con tintes policiales, los personajes y su construcción moral resaltan dentro de la trama detectivesca, aportando un añadido necesario al lector experto”.
En rigor, Alejandro Roemmers es Licenciado en Administración de Empresas formado en la UCA. Aunque escribe desde chico, se dedicó de lleno a la empresa hasta los 45 años. A sus 14 años, tuvo un encuentro con Jorge Luis Borges, donde le leyó algunos de sus poemas. Esta admiración lo llevó a convertirse en el coleccionista más grande de libros y manuscritos del autor de Ficciones, con un total de 6.000 piezas.
Actualmente, trabaja en la adaptación teatral de su libro Regreso en Patagonia, que contaría con las actuaciones de Franco Masini, Fernando Dente, Nahuel Pennisi y Laura Esquivel.
