Narcotráfico, corrupción y suspense son los protagonistas de la primera novela negra del autor superventas Alejandro G. Roemmers.
POR JUANJO VILLALBA
Aunque no es muy conocido en nuestras fronteras, Alejandro G. Roemmers es uno de los autores argentinos con más éxito en los últimos años. Descendiente de la familia creadora de los Laboratorios Roemmers, una de las empresas farmacéuticas más importantes de Latinoamérica, trabajó para ella en su juventud, pero hace años que se dedica exclusivamente a la literatura.
Su obra es amplia y diversa. Comenzó a escribir poesía a los ocho años y su obra poética ha sido objeto de numerosas distinciones y publicaciones. Pero fue en noviembre de 2008 cuando su carrera literaria dio un giro al presentar su libro ‘El regreso del Joven Príncipe’, una novela espiritual que ha sido traducida a más de treinta idiomas y de la que se han vendido más de tres millones de ejemplares en todo el mundo.
Desde entonces ha recibido multitud de distinciones y premios como Embajador de las Letras Argentinas, Personalidad Destacada de la Cultura de la Ciudad de Buenos Aires o huésped de honor de la Universidad de Salamanca.
Ahora publica ‘Morir lo necesario’, un nuevo libro en el que ha intentado hacer algo diferente. Se trata de una novela negra que ocurre en un Buenos Aires violento, gobernado por la corrupción y el narcotráfico y que empieza con el hallazgo de un cadáver en el terreno de un barrio privado en construcción de la capital argentina. Esto es, evidentemente, un mal augurio y una mala publicidad para sus constructores. Presionados por encontrar al culpable, el detective Luis G. Fernández junto a la oficial Romina Lacase no descansarán hasta descubrir la verdad.
La novela nos sumerge en un mundo lleno de drogas, corrupción y relaciones peligrosas que se irán entrelazando de manera compleja y trágica. Y que resulta interesante para conocer a una parte de la sociedad argentina de la que desde aquí no solemos tener noticias. También resulta interesante el tratamiento del autor de las relaciones personales dentro de una familia, como la falta de comunicación entre padres e hijos.
Una lectura que resulta fresca, moderna y sagaz, que cuestiona el origen único de los hechos, que deja claro que las responsabilidades, en este mundo de trama tan complicada, siempre son múltiples.