Obra

Soñadores Soñad

Alejandro Roemmers pasó gran parte de su juventud en Europa. En sus años de residencia en el viejo continente dedicó numerosas poesías a España, varias de las cuales se encuentran en su primer libro, “Soñadores, Soñad”, que reúne poemas escritos entre los catorce y los veinte años. Desde entonces su poesía ha sido objeto de numerosas distinciones y publicaciones e incluida en antologías de poesía americana. Desde aquella luminosa advertencia: “parece está el alma como adormecida” de Santa Teresa de Jesús existe una permanente esperanza de despertar, de pasar del ensueño a la realidad. Así ángeles anunciarán el nuevo día en cumplimiento del evangelio de San Juan para que “la luz sea de los hombres”. Todo el hermoso y profundo pensamiento de Alejandro Guillermo Roemmers en su espectacular dogma SOÑADORES SOÑAD, es una generosa ayuda en alcanzar esa luz, ya que el destino o compromiso del poeta es ser como “álamo erguido contra la furia de los vientos”. Rico y audaz manantial de palabras, ríos, sonidos, estrellas, silencios, colores, lunas, caminos, amor y muerte… enmarcan este insaciable universo de Alejandro Guillermo, que nos regala un tesoro de locura azul, de pasión peregrina, en inesperada joya de esplendor y belleza. “El mar es un sueño sonoro”, advirtió Antonio Machado, y SOÑADORES SOÑAD tiene ese ritmo incesante de las olas, rutas de cielos, imágenes imprevistas, reflejadas en claros espejos, desde la inmensidad de la Pampa, hasta la severa presencia de la España Inmortal. Montaña de Fe, poblada soledad y divina exaltación mística, o pagana, entre metáforas y salmos, nos advierte: “poned el sol en el cielo encapotado”. Y ese amanecer, en riguroso idioma, es nuestro agradecido corazón, frente a una obra de un ser milagrosamente excepcional: Alejandro Guillermo Roemmers.
Gotas Murmullo de notas, garúa, suave repiquetear del balcón; gotas de agua, voces de lluvia, en la noche metálico son.